Propósitos y mandamientos para 2024
salir más al campo, tocar más césped, comer más verde

- salir más al campo, tocar más césped, comer más verde
- bascular hasta encontrar el equilibrio entre mis energías creativas y el plural corporativo
- distinguir entre vicio y placer, luego no hacer caso a ninguno
- poner mi cuerpo al servicio de mi alma
- sonreír a los perros que se me crucen, tocar a los que se presten a ello
- aprender a hacer queso de cabra frito y empanado
- que me duela igual lo que me duele y me guste más lo que me gusta
- tolerar sonriendo a quién usa frases cliché, también son humanos válidos
- echarle valor, darse valor, hacerse valer (¿en ese orden?)
- conocer al perro de mi amiga Claudia
- huir del lujo y sus tenazas en la app de ASOS
- irse a dormir y sentir que ya está, que lo que me rodea es valioso
- amanecer y sentir que ya está, que no hay ninguna prisa
- llorar con lo que pensé que no lo haría
- ver mi vecino Totoro un día de diario
- quitarme el nudo en el pecho que tengo desde el 2009
- invitar a ramen a todo el que necesite amor
- aceptar que hagas lo que hagas siempre habrá algo que coincidirá con lo que haya hecho un tonto
- escribir un párrafo como el de Samantha a Joaquin en Her
- darme cuenta de que nunca estuve sin que estuviesen allí mis pies
- gritar más amablemente en el Overcooked 2
- tatuarme algo inteligente que dijera Erwin Smith
- no mirar el reloj y perderme en el tiempo
- hacer la palabra ‘cuidar’ un acompañamiento a través de las estructuras del dolor, no de la evitación
- trabajar con lo que tenga aquí y ahora
- bajarle a la ensoñación un 12% de intensidad
- asegurarme de mirar a los ojos y escuchar antes de dar consejos
- organizar la semana con actos intencionales, no solo cursos de Udemy
- poner una lavadora con zapatillas blancas (solo tengo un par)
- no buscar satisfacción en las clasificaciones, ni en los números pares, ni en acumular datos en letterboxd
- repasar los diálogos de la peli de los Increíbles
- regalarle a mi abuelo ese libro sobre la reencarnación que me dejó David
- pasar una semana en el pueblo, bañarme en una parte del río donde nadie se haya bañado nunca
- quitarme las espinitas una a una
- no reírle todas las gracias a mi peluquero
- inventar un refrán y popularizarlo
- probar el videojuego del Guille
- sustituir el responder ‘estoy bien’ por ‘estoy que me llevan los demonios’
- reconocer que cuando digo que lo hago lo mejor que puedo, la persona que tengo enfrente también lo intenta
- conectar con vidas pasadas a través de la limpieza del salón y la cocina
- enfrentarse a los problemas digitales maximizando la ventana en vez de huir
- inventar un personaje para la reunión de aniversario de los 10 años del instituto
- contar más veces el chiste de la naranja
- cada vez que me encuentre con alguien que ya no veo, decirle ‘ya no te pasas por el parque de los tubos de cemento’
- tener una lista de ideas hechas con amor, pero no hacer del amor (solo) una lista de ideas
- aceptar de una vez por todas que no soy una versión hispana del titán de Ataque